viernes, 9 de marzo de 2018

El sueño de Mario.

Cogí unas gafas nocturnas y me llevó un autobús volador a un país llamado
Tiranosaurius. Y al amanecer, cuando se despertaron mis padres, yo no estaba en casa.
Mis padres tuvieron que coger el autobús para buscarme; pero se fueron a otro sitio, a
Chuchelandia, porque ellos pensaban que yo estaba allí. Y cuando yo me
subí a un dinosaurio, éste se puso a bailar, y mientras tanto, mis padres y mi hermano
se pusieron a comer chuches en Chuchelandia. Fin.

1 comentario:

  1. Jajajajajajaja....Que chulo!!!!...Me encantan las chuches!!!!!....😆

    ResponderEliminar